Alain Platel – C(H)OEURS, Teatro Real Madrid
Contenidos
– 20 December – Giménez-Morte, C., Soprano Manzo, V., Bayarri Furió, A., Tena Medialdea, M.D. & Mesa García, S. (eds) (2018). Research in Dance. Sevilla 2018. 10th Anniversary. Valecia: Ediciones Mahali, Acotaciones. Revista de Investigación y Creación Teatral (Madrid, Spain).
– 7 November – Communication “A Quarreling Pair (2007) by Bill T. Jones, a reference in dance in the digital age”, 5th International Conference Re: Generations 2019: dance and the digital space (Manchester, United Kingdom)
Revolve Dance Anniversary edition 2021 – Walpurgis Night
Michael Keegan-Dolan tiene una sólida reputación como uno de los coreógrafos más dotados de nuestro tiempo. En las últimas décadas, ha creado piezas tan duraderas y originales como sus versiones de La Consagración de la Primavera y El Lago de los Cisnes. Son obras de danza teatral en su máxima expresión, con una personalidad distintiva, un lenguaje escénico personal y una formidable profundidad emocional. Su última creación, MÁM (2020), representada en los Teatros del Canal de Madrid, tiene una pretensión similar.
El lenguaje de la danza de Keegan-Dolan es un poderoso vehículo para esa crónica de la vida. Sus movimientos son animados y chispeantes, pero también tranquilos y no enfáticos. Fluyen con una fluidez perfecta, llegando a ser hipnóticos por momentos. Una razón importante de su exitosa fuerza es la relación simbiótica con la música. Además de la concertina de Begley, el conjunto de música paneuropea s t a r g a z e añade toques contemporáneos a la coreografía. Se trata de una pequeña orquesta experimental de músicos de formación clásica que proyecta calidez además de una sensación de novedad. El resto de los elementos escénicos complementan elegantemente la atmósfera cinética y auditiva. La escenografía de Sabine Dargent es austera pero muy eficaz (el cambio de telas de fondo que marca el cambio de escenas es brillante). El vestuario de Hyemi Shin, en blanco y negro, realza la expresividad de los cuerpos que bailan con sencillez, y la iluminación de Adam Silverman ayuda a desplazar el foco de atención de lo individual a lo comunitario, reforzando el hilo conductor de la obra.
Revolve Dance Anniversary edition 2021 – Swan lake, Junior
Fiel a la obra original, Angelin Preljocaj sitúa el cuento de la princesa de los cisnes en el contexto de la sociedad actual. Después de Blancanieves y Romeo y Julieta, Angelin Preljocaj vuelve al ballet narrativo y a su gusto por los cuentos y aborda este monumento del repertorio clásico. Fiel a la obra original, sitúa la historia de la princesa del cisne en el contexto de la sociedad actual. Mezclando la obra maestra musical de Tchaikovsky con arreglos más contemporáneos como le gusta hacer, se apodera del mito de la bailarina del cisne. Un trabajo que inició en 2018 con Ghost, donde ya homenajeaba a Marius Petipa proyectándose en el imaginario del coreógrafo cuando se le ocurrió la idea de su Lago de los Cisnes.
Un actor se enfrenta al reto de interpretar a Ricardo III, el despiadado monarca de la tragedia de William Shakespeare. Lleva toda su vida interpretando papeles secundarios y cree que se merece esta oportunidad. Durante la construcción del personaje, comienzan a surgir las afinidades entre el actor y el monarca inglés. A medida que sus historias vitales se entrelazan, la relación entre el actor, el personaje y el espectador es cada vez más estrecha. Historia de un jabalí gira en torno a los mecanismos del poder contemporáneo, el deseo y el resentimiento, y propone una reflexión sobre los límites de la ambición humana.
El lago de los cisnes – Reseña especial del 30º aniversario del Ballet Universal
Michael Keegan-Dolan tiene una sólida reputación como uno de los coreógrafos más dotados de nuestro tiempo. En las últimas décadas, ha creado piezas tan duraderas y originales como sus versiones de La Consagración de la Primavera y El Lago de los Cisnes. Son obras de danza teatral en su máxima expresión, con una personalidad distintiva, un lenguaje escénico personal y una formidable profundidad emocional. Su última creación, MÁM (2020), representada en los Teatros del Canal de Madrid, tiene una pretensión similar.
El lenguaje de la danza de Keegan-Dolan es un poderoso vehículo para esa crónica de la vida. Sus movimientos son animados y chispeantes, pero también tranquilos y no enfáticos. Fluyen con una fluidez perfecta, llegando a ser hipnóticos por momentos. Una razón importante de su exitosa fuerza es la relación simbiótica con la música. Además de la concertina de Begley, el conjunto de música paneuropea s t a r g a z e añade toques contemporáneos a la coreografía. Se trata de una pequeña orquesta experimental de músicos de formación clásica que proyecta calidez además de una sensación de novedad. El resto de los elementos escénicos complementan elegantemente la atmósfera cinética y auditiva. La escenografía de Sabine Dargent es austera pero muy eficaz (el cambio de telas de fondo que marca el cambio de escenas es brillante). El vestuario de Hyemi Shin, en blanco y negro, realza la expresividad de los cuerpos que bailan con sencillez, y la iluminación de Adam Silverman ayuda a desplazar el foco de atención de lo individual a lo comunitario, reforzando el hilo conductor de la obra.